Una máquina expendedora que ofrecía como premio perros y gatos cachorros generó indignación y una ola de críticas en China y el resto del mundo.
La modelo china Ji Xiaowen la denunció a través de su cuenta en la red social Weibo, y las imágenes tomadas en el centro comercial de Shanghai donde el polémico artefacto se encontraba se viralizaron rápidamente.
Tras el escándalo desatado, sobre el cual también PETA se pronunció, la compañía Yi Chong Yi Wu, dueña del aparato, anunció que el mismo será clausurado y prometió no volver a utilizar animales como premio.
A su vez, aseguró que pondrá en adopción a los gatitos y perritos exhibidos.
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