Después de tres meses de investigación, un abusador de menores fue detenido en el barrio de Almagro con un un vigente pedido de captura internacional, luego de haber sometido por cuatro años a una menor de edad.
El sujeto, de nacionalidad colombiano y de 43 años, fue declarado en rebeldía el pasado 6 de julio por la Unidad Fiscal Especializada en Investigación Criminal Compleja (UFECRI), a cargo del fiscal José María Campagnoli.
El hombre fue imputado por abusar sexualmente entre los años 2015 y 2019 de la hija de su expareja en los domicilios en que vivían en los barrios de Palermo y Recoleta.
La investigación fue realizada por la División Capturas y Prófugos de la Policía de la Ciudad y los oficiales lo ubicaron en un inmueble de la calle Billinghurst al 500, en Almagro.
Allí lo detuvieron y lo dejaron a disposición de la Justicia.
La Justicia salteña condenó a trece años y seis meses de prisión efectiva a un hombre de 37 años por resultar autor material y penalmente responsable del delito de "abuso sexual con acceso carnal agravado por la guarda y la convivencia preexistente con una menor de dieciocho años (continuado)", en perjuicio de su hijastra menor de edad.
El juez José Luis Riera, vocal de la Sala VI del Tribunal de Juicio, ordenó que el sujeto sea trasladado a la Unidad Carcelaria. Dispuso que se le realice extracción de material genético para su incorporación al banco de datos correspondiente.
Los abusos salieron a la luz cuando la víctima le contó a la preceptora, en el colegio, que su padrastro le había pegado y que abusaba de ella.
La menor llegó al establecimiento dolorida porque el acusado la había golpeado el día anterior con un cinto cuando se enteró de que ella “se había hecho la yuta”.
La preceptora advirtió que la alumna no podía caminar y le preguntó qué le pasaba. Entonces la menor decidió mostrarle los moretones que tenía en las piernas y brazos, y le contó que el imputado abusaba de ella desde que tenía diez años de edad.