Drama: 40 hechos criminales contra ancianos por jornada

Los datos surgen de un nuevo informe del Archivo Mensual de Violencia e Inseguridad, desarrollado por la ONG Defendamos Buenos Aires con la asistencia del Estudio Miglino y Abogados, donde quedó acreditado que en los últimos 12 meses, desde el 1 de diciembre de 2021 al 1 de diciembre de 2022 hubo 14.600 ataques salvajes contra los ancianos que viven en el denominado distrito AMBA. "Estamos hablando de nada menos que 40 ataques cada día, donde habitan el 50 por ciento de todos los jubilados argentinos. A raíz de estos graves actos delictivos, murieron 60 personas mayores en el mismo lapso. Hubo desde estafas con la modalidad ‘cuento del tío’, a robos en cajeros automáticos, robos perpetrados por bandas de motochorros en la vía pública, robos en su casa, bajo la modalidad ‘entradera’ o ‘salidera’ e incluso palizas dentro del hogar perpetradas por los mal llamados ‘cuidadores de ancianos’, que en realidad son delincuentes que buscan dañar o incluso matar al adulto mayor para quedarse con su casa o con sus bienes", indicó el abogado Javier Miglino.

En el hecho ocurrido en Floresta los sujetos fueron extremadamente violentos, e incluso el marido de Violeta, la jubilada atacada, sufrió un terrible golpe en la cabeza con un ventilador y golpes en la cara y en los oídos que comenzaron a sangrarle. Violeta también fue agredida y no tuvieron más remedio que dejarse pegar y dejarse robar porque la banda estaba conformada por al menos ocho ladrones.

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Otros casos emblemáticos de inseguridad contra abuelos. "La zona norte de la Ciudad de Buenos Aires es especialmente peligrosa para los jubilados. En especial Belgrano y Núñez. Y justamente en este último barrio, un jubilado de 75 años fue amenazado con un cuchillo sobre la garganta, por dos criminales que pretendían robarle el auto. Una vez conseguido el vehículo, los delincuentes se dieron a la fuga. Sin embargo el señor mayor quedó con un susto de muerte. Incluso la misma banda criminal, fue vista robando también en el barrio de Nuñez, lo que habla de amplias zonas liberadas por parte de la Policía en la Capital Federal", dijo Miglino.

La mitad de los abuelos atacados no sobrevive más de un año. "En el mismo momento que se producía el robo al jubilado de Nuñez, otras dos personas mayores eran atacadas en Ituzaingó y en San Justo. A partir de charlas que tenemos con médicos que atienden y le hacen un seguimiento a los adultos mayores luego de estos episodios violentos, nos han confesado que apenas la mitad de ellos sobrevive un año desde el ataque; lo que significa que los ladrones nos están matando a nuestros abuelos", dijo Miglino.

Los abuelos tienen miedo de denunciar. "Muchos ancianos no denuncian a aquellos que los golpean, los roban o los estafas porque temen represalias. A esto se agrega la dificultad de dar con los delincuentes que en el algunos casos conforman sofisticadas bandas de estafadores que utilizan chips telefónicos de bolseros o de líneas prepagas o de teléfonos robados que aún funcionan y de ese modo la titularidad complica la investigación judicial, porque los ladrones y estafadores descartan los móviles luego de haber conseguido un botín", concluyó Miglino.