Así, la ministra explicó cómo funcionará: "No podrán cortar las calles. Sí podrán hacer manifestaciones de manera ordenada". De esta manera, las organizaciones que programen marchas, deberán informar el horario y entre qué puntos marcharán, pero no podrán cortar calles y quedarse allí.
En cambio, en las manifestaciones espontáneas, las fuerzas de seguridad acudirán al lugar y les pedirán "por las buenas" a los manifestantes que se retiren. "Les van a dar cinco, 10 minutos para desalojar, por las buenas. Se van o los sacamos", detalló.
En cuanto a las fuerzas de seguridad que intervendrán, la ministra comentó que "cuando está programada (la manifestación), son líneas (las que actúan) que no tienen armas letales. Actuarán con el uso mínimo de la violencia legítima, pero sin armas de fuego".
"No queremos ni encapuchados, ni palos, ni elementos que puedan herir a otras personas", agregó Bullrich y completó que "en caso de que haya personas con palos y elementos contundentes, se secuestrarán. Y en caso de negativa, se detendrá a esas personas".
Por último, la funcionaria aclaró que "no lo vamos a lograr de un día para el otro, vamos a sufrir algunos cortes". "Si nos pasa lo de ayer, nosotros no podemos dejar a todas las ciudades sin policías para atender a los 200 cortes, porque estamos dejando a la gente indefensa", destacó.
"El objetivo concreto es haya convivencia, que no haya más cortes, que la gente pueda llegar a su trabajo, al hospital y a la escuela tranquilos. Y que los manifestantes puedan manifestarse en lugares donde no interrumpan el tránsito", finalizó.
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