Los gobiernos de la Ciudad de Buenos Aires y el bonaerense analizan por separado cómo instrumentar las salidas recreativas en esos distritos, tras el anuncio del presidente Alberto Fernández, que entre otros puntos, habilitó paseos de una hora con fines de "esparcimiento", en el marco del aislamiento por coronavirus, aunque dejó sujeto a cada jurisdicción la capacidad de regular y limitar la implementación de la medida.
El jefe de Gabinete del gobierno porteño, Felipe Miguel, dijo que hoy se definirá cómo se adaptará en el distrito el permiso de las salidas de una hora por día en un radio no mayor de 500 metros del domicilio autorizadas ayer, aunque aclaró que la jurisdicción tiene la atribución de "regular y limitar incluso el ejercicio" de esta iniciativa.
Miguel contó que ayer, luego de la presentación del Presidente en Olivos, tuvieron una reunión virtual el jefe de Gobierno y otros funcionarios, encuentro que repetirán hoy "para analizar en detalle los anuncios y la manera en que vamos a seguir adelante", en la tercera fase de la cuarentena administrada.
El funcionario explicó que esperan ver los alcances del decreto del Poder Ejecutivo Nacional que dispondrá las nuevas medidas para la tercer etapa del aislamiento que se inicia mañana y tener "asesoramiento jurídico" antes de tomar una decisión.
En tanto, el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, mantenía desde esta mañana conversaciones con los intendentes del conurbano y del interior bonaerense para definir de qué modo se adaptan a las realidades epidemiológicas de cada zona las nuevas medidas dispuestas.
Por el momento, según informaron voceros del Poder Ejecutivo, las eventuales salidas recreativas podrían implementarse sólo en "algunos distritos del interior" de la provincia y remarcaron que en los diálogos que se están manteniendo con los intendentes prima la idea de que, tal como dijo el Presidente, "el AMBA y los grandes aglomerados urbanos aún demandan una cuarentena más estricta".