Política
La decisión del juez federal Sebastián Casanello se produjo en el marco de la causa por supuesto lavado de dinero contra el titular de Austral Construcciones, que declarará hoy ante el magistrado.
A pedido del juez federal Sebastián Casanello, fue detenido Lázaro Báez después de aterrizar en el aeropuerto de San Fernando este martes por la tarde, procedente de Santa Cruz. El empresario debía declarar el próximo jueves en el marco de la causa que investiga lavado de dinero en "La Rosadita".
La convocatoria del magistrado se había producido tras la difusión de un video en el que se veía al hijo de Báez, Martín, contando imponentes sumas de dinero, y a quien le asignaron una consigna policial. La indagatoria de los Báez fue adelantada para este miércoles.
Casanello había dispuesto la inhibición de bienes y la prohibición de salir del país de todos los imputados.
Además de la detención del empresario vinculado con la familia Kirchner, Casanello también determinó la captura de Daniel Pérez Gadín, involucrado junto a su hijo en la misma causa. En todos los casos, la orden del juez fue por "riesgo de fuga".
"La noticia de la utilización de la aeronave privada propiedad de la firma TOP AIR SA, cuyo 49% pertenece a Austral Construcciones SA, que, a su vez, en un 95% pertenece a Lázaro Báez-, a dos de días de la fecha estipulada para la realización de la audiencia, es un detonante que dispara los riesgos de fuga y exige el dictado urgente de una medida idónea que asegure los fines procesales", justificó el juez en su escrito.
Según el magistrado, la "falta de un plan de vuelo", alertó sobre la posibilidad de que Báez se fugara.
El empresario se enteró de la orden de arresto cuando estaba en vuelo, junto a su hijo Martín y otras dos personas, pudo saber la agencia de noticias NA de fuentes judiciales. La detención del empresario tuvo lugar cerca de las 18.00 en el aeropuerto de San Fernando, luego de que aterrizara procedente de Santa Cruz, y desde allí fue trasladado a la División de Investigaciones Federales de Organizaciones Criminales (DIFOC) de la Policía Federal, ubicada en Gurruchaga y Santa Fe, en el barrio porteño de Palermo, frente al Jardín Botánico.
Está previsto que luego sea llevado a la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal Argentina, en Madariaga y General Paz, en Villa Lugano, donde pasará la noche.
Allí quedará detenido hasta la mañana del miércoles, cuando debe prestar declaración indagatoria ante Casanello.
Según informaron fuentes judiciales a esta agencia, Pérez Gadín fue detenido en su casa de Buenos Aires, al ser sindicado por el juez como el segundo en orden de responsabilidad en la causa, después de Báez.
En la investigación, también están involucrados su hijo Martín Báez; el contador Pérez Gadin; su hijo Sebastián; Walter Adriano Zanzot; el presidente de la financiera SGI, César Gustavo Fernández; y Fabián Virgilio Rossi, expareja de la vedette Iliana Calabró.
Mañana serán indagados Lázaro y Martín Báez, Daniel y Sebastián Pérez Gadin, Zanzot y Gustavo Fernández, en tanto que el viernes será el turno de Rossi.
Casanello había dispuesto la inhibición de bienes y la prohibición de salir del país de todos los imputados.
Además de la detención del empresario vinculado con la familia Kirchner, Casanello también determinó la captura de Daniel Pérez Gadín, involucrado junto a su hijo en la misma causa. En todos los casos, la orden del juez fue por "riesgo de fuga".
"La noticia de la utilización de la aeronave privada propiedad de la firma TOP AIR SA, cuyo 49% pertenece a Austral Construcciones SA, que, a su vez, en un 95% pertenece a Lázaro Báez-, a dos de días de la fecha estipulada para la realización de la audiencia, es un detonante que dispara los riesgos de fuga y exige el dictado urgente de una medida idónea que asegure los fines procesales", justificó el juez en su escrito.
Según el magistrado, la "falta de un plan de vuelo", alertó sobre la posibilidad de que Báez se fugara.
El empresario se enteró de la orden de arresto cuando estaba en vuelo, junto a su hijo Martín y otras dos personas, pudo saber la agencia de noticias NA de fuentes judiciales. La detención del empresario tuvo lugar cerca de las 18.00 en el aeropuerto de San Fernando, luego de que aterrizara procedente de Santa Cruz, y desde allí fue trasladado a la División de Investigaciones Federales de Organizaciones Criminales (DIFOC) de la Policía Federal, ubicada en Gurruchaga y Santa Fe, en el barrio porteño de Palermo, frente al Jardín Botánico.
Está previsto que luego sea llevado a la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal Argentina, en Madariaga y General Paz, en Villa Lugano, donde pasará la noche.
Allí quedará detenido hasta la mañana del miércoles, cuando debe prestar declaración indagatoria ante Casanello.
Según informaron fuentes judiciales a esta agencia, Pérez Gadín fue detenido en su casa de Buenos Aires, al ser sindicado por el juez como el segundo en orden de responsabilidad en la causa, después de Báez.
En la investigación, también están involucrados su hijo Martín Báez; el contador Pérez Gadin; su hijo Sebastián; Walter Adriano Zanzot; el presidente de la financiera SGI, César Gustavo Fernández; y Fabián Virgilio Rossi, expareja de la vedette Iliana Calabró.
Mañana serán indagados Lázaro y Martín Báez, Daniel y Sebastián Pérez Gadin, Zanzot y Gustavo Fernández, en tanto que el viernes será el turno de Rossi.
Insultos a los detenidos en la vereda de la comisaría 23ª
Una muchedumbre festejó y abucheó anoche la llegada de Lázaro Báez y su contador, Daniel Pérez Gadín, a la comisaría de Palermo en la cual quedaron detenidos a la espera del traslado a la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal, en Villa Lugano.
Cientos de personas, muchas con carteles y pancartas improvisadas, se agolparon sobre la vereda de la comisaría 23ª y con sus celulares grabaron y fotografiaron el ingreso de los sospechados de lavar dinero a la sede policial, como si se tratara de estrellas de Hollywood llegando a la ceremonia del Oscar.
El empresario santacruceño y su contador fueron trasladados a la sede de la División Investigaciones Federales de Organizaciones Criminales (DIFOC), ubicada en el barrio porteño de Palermo, en cuyo piso superior funciona la comisaría 23ª. de la Policía Federal.
El traslado de Báez de San fernando a la comisaría fue rápido y al caer la tarde tanto el empresario santacruceño como Pérez Gadín ya habían ingresado a la sede de la DIFOC, ubicada en la intersección de Avenida Santa Fe y Gurruchaga, donde los esperaba una verdadera legión de fotógrafos improvisados que, celulares en mano, forcejeaban unos con otros para obtener un primer plano del comprometido empresario.
"Todos presos ahora mismo", gritaba exaltada una señora mayor haciendo pie a duras penas sobre un cajón de madera abandonado sobre la vereda de Gurruchaga. "¡Qué buena noticia! ¡Que pase el que sigue!", festejaba unos pasos más allá un cartero, agitando en lo alto una maltrecha cartulina que la lluvia humedeció a tal punto que borró lo que llevaba escrito.
Otra mujer joven también se regodeaba: Al fin, dos corruptos van presos. "Pensé que esto nunca lo iba a ver", afirmó sonriente.
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