Novak Djokovic alcanzó una vez más la final en el Masters 1000 de Miami donde se consagró seis veces. El búlgaro Dimitrov no pudo hacer nada ante la contundencia del serbio.
Con la presencia de Lionel Messi en las tribunas, Novak Djokovic dio una nueva cátedra de tenis a sus 37 años. Esta vez la lección fue en Miami donde aplastó al búlgaro Grigor Dimitrov (6-2 y 6-3) y se clasificó en 70 minutos para la octava final de su carrera en el Masters 1000 de Miami. El serbio peleará por su séptima corona en Florida y por el título 100 de su carrera.
Djokovic empató al suizo Roger Federer como únicos jugadores capaces de alcanzar al menos una final en el Tour ATP en veinte temporadas consecutivas y espera en la final a uno entre el estadounidense Taylor Fritz (n.4) y el checo Jakub Mensik (n.54).
Messi, capitán del Inter Miami y de la selección argentina, acudió all Miami Open para ver junto a su mujer, Antonela Roccuzzo, la semifinal del tenista más ganador de títulos de Grand Slam de la historia.
El 10 se mostró sonriente en un palco de la cancha central vestido con una camiseta negra bajo una chaqueta vaquera y con un gorro marrón.
El serbio alcanzó la final número 60 de su carrera en los Masters 1.000 e igualó las ocho finales de Andre Agassi en Miami, donde solo perdió una de sus anteriores siete partidos por el título.
Curiosamente, el único en negarle el título de Miami en la final fue el británico Andy Murray, que ahora entrena a Djokovic.
Djokovic ofreció un monólogo y desactivó a un Dimitrov (n.15), que el año pasado había sido finalista en este torneo.
El serbio incrementó su balance contra Dimitrov a 13-1 y a un perfecto 9-0 en pista rápida. La única victoria del búlgaro llegó en Madrid 2013.
Solo hubo un momento de esperanza para Dimitrov, que logró una rotura a quince en el primer juego del partido. Pero Djokovic se la devolvió de forma inmediata y logró un total de tres roturas en el primer set para llevárselo con un 6-2.
Dimitrov estuvo condicionado por un problema con un aficionado que aparentemente le increpó entre el segundo y el tercer juego. El juez bajó de su silla y ordenó que la persona fuera alejada de la pista.
No cambió el guión en el segundo parcial, en el que Djokovic se escapó rápido hacia el 3-0 y no dio oportunidades a Dimitrov de volver a meterse en el partido.
El serbio tan solo cometió cinco errores no forzados por los 32 de Dimitrov.
No es la primera vez que Messi acude a grandes eventos deportivos en Miami y ver en acción a Djokovic resultaba una gran tentación. Así el capitán del seleccionado argentino se sentó en las tribunasr junto a su esposa, Antonela Roccuzzo, para disfrutar de la lección de tenis del serbio.
El argentino, que no viajó con la selección argentina al recuperarse de un problema en un abductor, podría tener minutos este sábado en el partido del Inter Miami contra el Philadelphia Union en la MLS.
Messi no es el único deportista de elite que ha acudido al Miami Open en los últimos días. El francés Paul Pogba, actualmente sin equipo, también se dejó ver por las gradas en los últimos días.