El proceso de Gallardo debutó a mediados de 2014 en un mano a mano por Copa Argentina. Todo un signo de lo que vendría. Aquel 0-0 y posterior paso por penales fue el primero de los cruces eliminatorios que, con el tiempo, fueron alimentando el mito que da cuenta que River cuando huele a “final” no te da chances.
Sin dudas toda esta etapa está marcada por los clásicos ante Boca precisamente al que más enfrentó en cruces definitorios. Con cuatro enfrentamientos, Copa Sudamericana (2014), Copa Libertadores (2015 y 2018) y Supercopa Argentina 2018, Boca es el rival top en estas series de partidos y seguirá siéndolo con esta nueva batalla por semifinales de Libertadores 2019 a jugarse el martes que viene y a fin de mes.
River y Boca, el reencuentro que genera morbo en todo el mundo
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Por Libertadores es donde más cruces hubo: 14 con 12 triunfos y solo dos derrotas con partidos increíbles ante Independiente del Valle (20 situaciones de gol en la revancha) y Lanús luego de ir 3 goles arriba y con aquel debut terrible del VAR.
Por Sudamericana tiene 8 cruces por las ediciones 2014 que ganó y 2015 que perdió en semi ante Huracán: fueron 7 ganadas y 1 perdida.
Por Recopa jugó 3 y las ganó todas ante San Lorenzo 2015, Santa Fe de Bogota 2016 y Paranaense 2019.
Por torneos a nivel mundial tiene 5 cruces incluyendo 4 de mundial de clubes y 1 de Suruga Bank con tres ganadas y dos perdidas.
A nivel local se hace fuerte en la Copa Argentina donde tiene dos títulos y solo 3 derrotas en 25 cruces disputados. Por Supercopa Argentina perdió con Huracán y Lanús, pero le ganó a Boca que tuvo mucho peso histórico. Finalmente en Copa de Superliga que arrancó este año jugó 2 llaves y ganó 1 perdiendo la otra ante los Tucumanos por diferencia de gol.
El dato llamativo en todo esto es que cuando los cruces son a dos partidos nunca perdió los dos y que una de las pocas veces que fue superado por el rival de modo notorio fue con el Barcelona en la final del mundial de clubes 2015.
River va a jugar ante Boca una semifinal de Libertadores histórica más aún porque vienen de jugar la final en el 2018. No hay dudas que es un partido aparte y único, pero las estadísticas y las mochilas pesan.
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