Fútbol
El plantel entrenó en un clima de tristeza y luego el Apache compartió un asado en la casa de su amigo Fernando Tobio. La dirigencia da por seguro que al menos hasta fin de año el “10” seguirá en el Xeneize.
La herida tardará en cicatrizar. La eliminación copera del último jueves, que dejó a Boca sin el objetivo principal del año, pegó fuerte y trajo muchos rumores, encabezados por el que indica que Carlos Tevez podría dejar la institución golpeado por la frustración deportiva y por algunas cuestiones internas que no le gustan. Por eso, desde ayer mismo, se empezó a "mimar" al máximo ídolo de Boca de la actualidad para buscar que siga en el plantel. Vale recordar que el vínculo de Tevez con la institución se extiende hasta junio de 2018.
Y dentro de este contexto empezaron a surgir las voces oficiales. Como la de Royco Ferrari, vicepresidente primero, quien aseguró que "Carlos va a seguir en Boca, no hay oferta ni nada por el estilo y él no nos manifestó en ningún momento su intención de dejar el club. Por eso nos miramos en el vestuario asombrados por los rumores", dijo el dirigente en el programa Cronómetro en Cero, por Radio Güemes AM 1050.
Mientras tanto Juan Carlos Crespi, integrante de la Subcomisión de Fútbol, no fue tan optimista aunque puso un límite: "Creo que al menos hasta fin de año se va a quedar en Boca".
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Una charla grupal
A todo esto el sábado en Casa Amarilla tuvo, además de puertas cerradas para la prensa y los socios, un clima de tristeza lógico por la eliminación en la Libertadores y una charla entre Guillermo Barros Schelotto y el grupo de futbolistas.
Luego de la práctica Carlos Tevez fue a compartir un asado a la casa del defensor Fernando Tobio, su amigo y que por decisión de la dirigencia no siguió en Boca y volvió al Palmeiras de Brasil, situación que también contrarió un poco al Apache. En el encuentro, que luego quedó retratado en las redes sociales ya que se subió una foto a Instagram, también estuvo Pablo Migliore, ex arquero xeneize y que actualmente ataja en Almirante Brown. Allí, al menos para la foto, se vio a un Carlitos Tevez sonriente, buscando en este encuentro entre amigos recargar pilas para los desafíos que se vienen en Boca y que, según los dirigentes, lo seguirán teniendo como bandera adentro del campo de juego.Te puede interesar:
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