El juez Rafecas desestimó las denuncias contra Carlos Pagni y Ari Lijalad por inexistencia de delito, defendiendo la libertad de prensa y el debate político.
El juez federal Daniel Rafecas desestimó este miércoles sendas denuncias penales presentadas por el presidente Javier Milei contra los periodistas Carlos Pagni y Ari Lijalad, al considerar que sus expresiones están amparadas por el derecho a la libertad de prensa y no constituyen delito alguno.
En el caso de Pagni, la presentación del Presidente había sido motivada por comentarios realizados el 28 de abril en su programa “Odisea Argentina”, que se emite en el canal LN+, donde el periodista trazó un análisis histórico que, según el Milei, insinuaba un paralelismo entre su ascenso al poder y el de Adolf Hitler en Alemania.
Para presentar su denuncia, el mandatario consideró que tales afirmaciones expresadas por el periodista afectaban su honor y reputación.
De todos modos, Rafecas concluyó que las expresiones de Pagni se encuadran dentro del debate político y no representan una imputación concreta ni una injuria personal. “No se atribuyó delito alguno ni se deshonró intencionalmente al denunciante”, sostuvo el magistrado, subrayando que las críticas se emitieron en el marco del ejercicio legítimo de la libertad de expresión.
El fallo detalla fundamentos constitucionales e internacionales sobre libertad de prensa, y remite al precedente “Kimel vs. Argentina” de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, donde se sostiene que los funcionarios públicos deben tolerar un mayor grado de crítica. Rafecas advirtió que perseguir penalmente opiniones periodísticas podría lesionar el debate democrático.
En igual sentido, y también en la misma jornada, el juez desestimó otra denuncia de Milei contra el periodista Ari Lijalad, quien había publicado el 4 de mayo pasado una columna en el portal “El Destape” titulada “Milei, entre el odio a la información y el discurso nazi”.
De esta forma, finalmente ambos expedientes fueron archivados por la Justicia por inexistencia de delito.